Es tal el grado de desfachatez, sinvergüenzada y descaro imperante que -según los diarios- hay 156 candidatos a alcaldías que o han sido procesados por delitos relacionados con su cargo, o están enjuiciados o son sospechosos de alguna anomalía en cuanto al mal manejo de recursos. Los cuestionados figuran en delitos que van desde evasión fiscal, morosidad bancaria y patronal con el Seguro Social hasta condenas penales y civiles y en algunos casos se trata de exfuncionarios públicos.
No cuentan en ese número los que guardan prisión preventiva por algún presunto delito ya que estando en esa situación no pueden ser candidatos.
El hecho es más que preocupante porque pareciera que para éstos, las alcaldías son sinónimo de pingües negocios, fuente de poder y enriquecimiento. Más grave aún : sospechamos que la posibilidad de aprovecharse de la función pública para beneficio personal la han terminado viendo como un recurso normal, moralmente aceptable, lógico.
El solo hecho de estar cuestionado por cualquier delito o irregularidad debería ser motivo para que una persona digna, respetuosa de nuestra institucionalidad, se abstuviera de participar en las elecciones como candidato.
Ya llegamos a esa etapa en esta carrera propiciada, estimulada y validada por el neoliberalismo capitalista.
¿No que desde un puesto público debemos servir a la sociedad? ¿Sería que mis mentores me engañaron?
Fuente:
Gracias por la información y permítanme manifestar mi apoyo a tu información. Esto es grave, los ciudadanos nos tenemos que informar, definitivamente. NO podemos permitir que desde la Alcaldía y ninguna otra forma de gobierno esté en manos de sinvergüenzas. Yo voto para que en estas elecciones sepamos por quien vamos a votar, que Dios nos ilimine para saber elegir!
ResponderEliminarcon la escuela que desarrollaron nuestros políticos del siglo pasado, sobre todo del último tercio, no es extraña esta descomposición y esta aberración social que llamamos "política", donde solo alcanza para satifacer el bolsillo y los egos de una minoría de "vivos" (no vivos del concepto "me late el corazón", si no del opuesto "me late el oportunismo", el bolsillo, los intereses creados y sobre todo la concecionitis) No olvidemos que nuestros últimos presidentes han sentado catedra (nunca lo olvidemos, por favor)... no nos engañaron nuestros mentores, nos ha estado engañado esta dirigencia politica que ha torcido el concepto de democracia a su favor para institucionalizar la corrupción (una especie de mafia autorizada que actua sobre lo que aparentemente es legal... ya vieron como Rodrigo Arias se da el taco de cuestionar las deciciones de los jueces del caso Crucitas) y sobre la burocracia, que es el maravilloso principío de organizar lo inútil... iles de papeles guardados que no sirven de nada pues cada quien hace "lo que le roca el sobreano pepino..."
ResponderEliminarahora, pero no es un mal naional... el planeta está lleno de este comportamiento inducido: "Remember Aldous Huxley..."
Si amigos: esta situación es una prueba contundente del desastre moral en que ha caído nuestra dirigencia política y de la desinformación ciudadana...
ResponderEliminar¡Es hora de la denuncia, es hora de la lucha por rescatar la dignidad nacional!