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| ¿Puede usted compensar el alza en el costo de la vida con ¢166 colones diarios? |
El gobierno debe asumir el compromiso que adquirió con el pueblo al ser electo.
Si hay algo que se opone al plan fiscal es la forma en que se ha manejado el gasto público en el pasado cercano y existen acontecimientos recientes que refuerzan esa oposición.
Aceptar un plan fiscal que no es modelo de eficiencia en recaudación y equidad cuando recientemente se discute de manera pública el manejo alegre que se hizo de la deuda política por parte del mismo partido del gobierno, cuando una docena de alcaldes están cuestionados por corrupción, en el momento en que los diputados quieren recetarse aumentos desmedidos y los magistrados claman por romper el tope de la cesantía, es prácticamente pedir imposibles.
En medio de esa situación, imponernos a la fuerza un ofensivo aumento al sector público de cinco mil mensuales y el plan fiscal pactado entre don Ottón y doña Laura con el argumento de que si no los aceptamos nos vamos "a pique", huele más a chantaje que a preocupación real.
Los indicadores de la economía no han demostrado que estamos al borde de un precipicio y que el paquete propuesto sea el único asidero de salvación. Crear un nuevo plan fiscal que contemple los reclamos que con justicia han venido exigiendo los trabajadores y los mecanismos eficientes para detener el fraude y la evasión y que sea capaz de financiar un aumento salarial razonable y equilibrar las cuentas del estado, es lo que se impone. Si no se hace, lo que está al borde del precipicio es la paz social.
Solo hace falta la voluntad y la firmeza de un gobierno que tenga en la mente y el corazón el sentido de la justicia social, un gobierno que renuncie a los dictados del gran capital y asuma el compromiso con las mayorías que adquirió al ser electo.
(Imagen tomada de El País.CR)
Que va a poder vivir doña Presidente con 166 diarios de aumento, si vieran el chozón que tiene en Nueva San José, con 166 ni para el pan del desayuno esa señora
ResponderEliminarEstá teniendo fuerza la protesta sindical pero no me queda claro el planteamiento integral, de pronto lo veo muy "economicista" aunque algo es algo, pareciera que la indignación ya arrancó.
ResponderEliminarEn mi seccional del cole hay buen ambiente, aunque debo señalar la mala nota: vieran el montón de gente incapacitada aquí y lo peor es que tienen color, lo peor es que donde más hay es en los quintos, porque lo que ya arrancan perdiendo esos chiquillos/as lo que es injusto porque a ese personal no es fácil reponerlo, cuesta encontrar gente que acepte hacer incapacidades, porque no es ganga trabajar por tan poco tiempo.
ResponderEliminarPresidenta, no presidente
ResponderEliminarBuenas las manifestaciones sindicales, calles totalmente copadas. Tampoco me queda claro el planteamiento sindical: ¿Se circunscribe al aumento salarial?. Sé que reivindican un Plan Tributario equitativo pero...¿de palabra?...O: ¿en el marco de una propuesta seria, sustentada y concreta?
ResponderEliminar"La paz social al borde del precipicio". Mmmm...este título me parece un poco exagerado...
ResponderEliminarEs posible, si Eduardo hubiese revisado el texto seguramente hubiera propuesto cambiarlo. Nos referimos a que con decisiones y leyes que empobrecen aún más a un gran sector de la población, la inseguridad ciudadana, la inconformidad, las penurias económicas, el desaliento provocarán un clima de mayor agitación social que eventualmente podría terminar a futuro en violencia, como acaba de ocurrir en Grecia, donde en una sola noche incendiaron media ciudad, incluyendo hasta edificios históricos.
ResponderEliminarCoincido con ustedes en que pareciera un movimiento coyuntural provocado por la insatisfacción del exiguo aumento salarial, pero que debería incluir demandas que tengan que ver con la situación de deterioro de la sociedad costarricense y de su democracia.
ResponderEliminarEn fin...íbamos a ocuparnos hoy del "espectáculo Figueres", pero nos ha llegado un documento por correo electrónico sobre el problema de los indígenas de Talamanca y vamos a eso en la siguiente entrada.
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