Juan el Bautista, figura clave en el origen del cristianismo.

Óleo que representa a Juan el Bautista
de autor desconocido.*

La jugada política del emperador Constantino de reconocer al cristianismo como religión oficial, ante el crecimiento progresivo de este movimiento y la decadencia de las ideas paganas, le permitió administrar, dirigir y dominar a un movimiento religioso de pobres que desde entonces pasó a manos del poder de los ricos y finalmente desembocaría en la creación  del multimillonario y  poderoso estado del Vaticano. Entonces el espíritu de lucha por los pobres y oprimidos del cristianismo primitivo, se perdió.

Ateniéndonos a las más recientes investigaciones históricas, Juan el Bautista fue un activista religioso que contaba con miles de seguidores en la época en que tuvo su encuentro con Jesús de Nazaret en el Jordán y en la que la religión abarcaba todos los aspectos de la vida de los ciudadanos.

El movimiento de Juan se volvió tan peligroso para el dominio político de entonces que Herodes Antipas, quien era Gobernante de Galilea con el apoyo del Imperio Romano, decidió eliminarlo aprovechando el incidente de su matrimonio con la esposa de su hermano, repudiado por Juan. Juan, como sabemos, fue decapitado.

Su mensaje era revolucionario para la época : para él, sumergirse en las aguas del Jordán implicaba limpieza de pecados, la renovación espiritual y una nueva vida como ciudadanos libres que solo tenían que dar cuenta de sus actos a Dios. Aquí chocaba frontalmente con el dominio del sanguinario Imperio Romano.

Muerto Juan, Jesús recoge su mensaje y da inicio a su ministerio en una Judea que entonces estaba bajo el dominio del opresor Imperio Romano, con la complicidad muy conveniente económicamente hablando, de los sacerdotes Judíos, quienes recogían los impuestos para el imperio y disfrutaban de un porcentaje que les permitía vivir lujosamente.

Jesús  se rodea de un grupo de seguidores-hombres y mujeres- y emprende una tarea con su conocido mensaje revolucionario dirigido a los pobres y a los oprimidos que lo llevará en curso de colisión con las autoridades romanas representadas por un sanguinario y despiadado gobernador llamado Poncio Pilatos y desembocará en los hechos descritos en el nuevo testamento por todos conocidos y que el catolicismo rememora esta semana. (Incorporar mujeres en su movimiento fue también un acto revolucionario muy peligroso para las autoridades).

Lo que usualmente no se dice es que los seguidores de Jesús después de su ejecución, no se reagruparon en un movimiento único. El cristianismo primitivo se caracterizó por estar dividido por lo menos en cinco tendencias, muchas veces antagónicas, de las que sobreviviría una : la que conocemos hoy como "Cristianismo".

La jugada política del emperador Constantino de reconocer al cristianismo como religión oficial, ante el crecimiento progresivo de este movimiento y la decadencia de las ideas paganas, le permitió administrar, dirigir y dominar a un movimiento religioso de pobres que desde entonces pasó a manos del poder de los ricos y finalmente desembocaría en la creación  del multimillonario y  poderoso estado del Vaticano.

Entonces el espíritu de lucha por los pobres y oprimidos del cristianismo primitivo, se perdió.

*Como se sabe, no hay datos históricos sobre el aspecto físico ni de Juan ni de Jesús.