Pulse aquí para leer otras páginas:

martes, 13 de marzo de 2012

Los costarricenses y el síndrome de la rana

Después del fracaso del "Combo ICE", los políticos aprendieron que era mejor aplicar a los ticos el "Síndrome de la rana".


Imaginen una olla llena de agua, en cuyo interior nada tranquilamente una rana. Se está calentando la olla a fuego lento. Al cabo de un rato el agua está tibia. A la rana esto le parece agradable, y sigue nadando. La temperatura empieza a subir. Ahora el agua está caliente. Un poco más de lo que suele gustarle a la rana. Pero ella no se inquieta y además el calor siempre le produce algo de fatiga y somnolencia.
Ahora el agua está caliente de verdad. A la rana empieza a parecerle desagradable. Lo malo es que se encuentra sin fuerzas, así que se limita a aguantar y no hace nada más. Así, la temperatura del agua sigue subiendo poco a poco, nunca de una manera acelerada, hasta el momento en que la rana acaba hervida y muere sin haber realizado el menor esfuerzo para salir. Si la hubiéramos sumergido de golpe en un recipiente con el agua a cincuenta grados, ella se habría puesto a salvo de un enérgico salto. “Es un experimento rico en enseñanzas, dice el autor. Nos demuestra que un deterioro, si es muy lento, pasa inadvertido y la mayoría de las veces no suscita reacción, ni oposición, ni rebeldía”.


Nota: esta alegoría fue publicada por primera vez 
en el libro de Marty Rubin “The boiled Frog Syndrome”, en 1987.

18 comentarios:

  1. Es que hemos vivido entre comodidades, ni parecido a otros pueblos, para no ir lejos CA, donde si hay que sudarse la chaqueta para sobrevivir, lo que pasa es que ya eso se está perdiendo y comenzamos a pegar el brinco

    ResponderEliminar
  2. Eso de la rana es a la calse media a quien debe aplica´rsele, porque la gente más pobre, en el campo, en las fábricas, en las comunidades marginadas,la vida siempre le ha estado cuesta arriba

    ResponderEliminar
  3. El estado de bienestar no lo supimos cuidar, nos aprovechamos y lo deterioramos. Como las ranas, solo nos queda patalear porque a eso no lo salva nada, ya hoy nos alertan sobre las tarifas de agua, no más subsidios. Lo mismo ocurrirá con la electricidad y los teléfonos y si nos ponemos mano en corazón, tales subsidios no ten´´ian por qué tener que ser permanentes. Está bien en un principio (época de la universalización de servicios)pero luego la responsabilidad debía ser personal

    En el socialismo se abusó mucho de los subsidios estatales y miren dónde fue a parar

    ResponderEliminar
  4. Leí que en Italia el gobierno de Mario Monti está convenciendo, él en vez de desemplear está rebajando jornadas, congelando salarios hasta por 4 años y la gente le está aceptando porque como decía mi abuelita "el peor salario es el que no llega"

    ResponderEliminar
  5. Como empleada pública que soy (magisterial)recibiré con buen ojo el aumento salarial, pero que tenemos pluses tenemos, cosa que no tienen en el campo ni en las fábricas ni quienes trabajan en comercio informal y eso es un sistema injusto no puede llamarse de otra manera y que hemos tenido más garganta y tragado más pinol, la verdad aunque duela, por eso lo de la rana es una buena analogía

    ResponderEliminar
  6. ¿Merecemos el síndrome de la rana?. ¿Por qué tenemos el síndrome y no nos liberamos de él?.
    Un pueblo luchador y trabajador sí puede exigir derechos. Nuestra sociedad está inmersa en una gravísima crisis moral. El conformismo, la resistencia al cambio, la pérdida de valores, el ocio, la lucha por el dinero fácil y la incasable lucha por aprobar de leyes contra principios morales, la lista es interminable. Un pueblo sin amor por sus tradiciones, por su historia, por su idioma. Desde hace muchos años cambiamos el concepto filosófico de libertad por libertinaje. Somos ranas en una gran olla, es verdad. La culpa es nuestra.
    Cambiemos nosotros primero en lo personal y social, así la rana ya no tendrá que entrar más a la olla, será libre como el águila, sabia como la lechuza y astuta como la serpiente. Seamos ejemplo para los políticos y demagogos.
    Cada persona recoge lo que ha sembrado. Cada pueblo tiene el gobierno que escogió. Cada cuatro años este país escoge su Presidente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si, Carmen.

      Cada cuatro años escogemos el gobierno que siempre nos promete "una Costa Rica mejor", pero nunca dicen para quien ni los ticos nos lo cuestionamos.

      Cito a Marx:

      "El Ejecutivo del Estado moderno no es otra cosa que un comité de administración de los negocios de la burguesía."

      Eliminar
  7. Quisiera tener la fórmula para que este pueblo costarricense reaccione, es que no veo por dónde...

    ResponderEliminar
  8. DW, me permito responderle a su comentario dejado antes,con el permiso de Generación Rebelde:

    Don William los pueblos reaccionan cuando tienen hambre y grandes necesidades sociales. Al costarricense todo le es muy fácil tenemos: buen clima, agua potable, buena electricidad, buenos medios de transporte, dinero para comprar los alimentos, aunque sea lo básico, buenos servicios médicos, privados, pero los tenemos. Estamos domesticados para hacer el menor esfuerzo, evitamos la fatiga, dejar hacer, dejar pasar. Somos bendecidos por la madre naturaleza. Esto nos ha hecho para nuestro fracaso social: conformistas, débiles, poco luchadores. El hombre se hace fuerte enfrentando dificultados y solucionando problemas. Costa Rica salió en una encuesta internacional como el país más feliz del mundo, yo diría uno de los más irresponsables del planeta.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Carmen:

      Muy buena reflexión. A nosotros no nos costó esfuerzo alguno ni la independencia de España. Los ticos no hemos valorado lo que tenemos.
      A veces me gustaría madara a todos los costarricenses a darse una vuelta por centroamérica para que vean que por ejemplo, en algunos lugares, el telégrafo sigue siendo "tecnología de punta" y en amplias regiones no tienen ni algo parecido a un Ebais, mucho menos un hospital, pero si tienen niveles de miseria que nosotros ni imaginamos.

      Como siempre, cuando lo perdamos, la vamos a valorar.

      Tiene usted razón, conformistas, irresponsables.

      Eliminar
  9. Miren que Carmencita salió de las buenas. Carmencita te invito a mi blog que os puse nueva entrada y a los Roncahuita.

    ResponderEliminar
  10. de acuerdo con la señora Carmen, ya hemos comentado muchas veces aquí que CR necesita tocar fondo, ahorita seguimos creyendo que vivimos en la "Suiza"
    y es que es normal, todavía hay campo de maniobra para una clase media que no quiere darse por muerta, aunque ese campo de maniobra sea el chorizo, el fraude y quien sabe cuántas cosas mas.

    Presagio que la tocada de fondo no será pronto

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si Anna, el campo de manobra incluye como usted dice el chorizo, la mordida, el fraude...¡Ah! Y las tarjetas de crédito.

      Eliminar
  11. Que a Rodrigo Arias, en las redes, lo apodaron "Chorigo", o sea "chorizo", jejeé, creo que este doncito no va pero el se la cree, quien sabe quién está detra´s de todo talvez el Palidejo

    ResponderEliminar
  12. Esto es parte de un comentario que dejó Casandra en mi blog:
    "Acomodándome poco a poco y con bastante frío, estoy en Holanda ahora.
    Saludos a Gladys, Jeca, Pochita, Katmarce, Raquel, Carmen
    A DW, Roncahuita, Hattori, Sergio, Cannado
    ay que no sé si me olvida alguien,"

    ResponderEliminar
  13. No dejen de poner sus textos en mi blog
    (no ejen e pone sus testos en mi bló)

    ResponderEliminar
  14. Me encantó la entrada sobre "El lenguaje corporal del galanteo" que puso mi amiga y compañera de la UCR, Raquel, en su blog. Pase, para que lo disfrute, puro galanteo Roncahuitero:

    http://raquel-collardembar.blogspot.com/

    ResponderEliminar