Los Arias siguen vivitos y coleando

Sería un error considerar que los Arias desaparecen de la vida nacional. Ellos a lo largo de treinta años se han asegurado una gigantesca cuota de poder sea cual fuere el presidente del PLN o del PUSC (PLUSC, como se le llamó acertadamente)

Su presencia en el ámbito privado sigue incólume. Ahí están. Rodrigo solo fue apartado por los electores, pero ellos esperan poner otro "mientras tanto" como lo ha sido Chinchilla.
Sus tentáculos como grupo omnipotente abarcan actividades agrícolas como el azúcar, el tabaco y ahora la producción de biocombustibles. Tienen inversiones en salud, por lo que la CCSS para ellos es un estorbo inaceptable, quieren a toda costa invertir en generación eléctrica con sus biocombustibles, para lo cual es un estorbo el ICE. 

Paralelo a su poder en el sector privado, han creado una red no menos poderosa en el sector público: ahí está sus leales amigos en el Poder Judicial, en La Asamblea Legislativa, en la mayoría de las alcaldías del país, en el poder ejecutivo y seguirán estándolo si llega al poder don Johnny que se convertiría en un "sostenéme la mula" y gobernaría atado al imperio creado por los hermanos Arias.

En su paso por el poder visible casi fáctico, han dictado leyes a su gusto y conveniencia que les permiten conseguir casi siempre lo que quieren. Si no han destruido al ICE y a la Caja, si no han conseguido "Crucitas", es por una poderosa y creciente resistencia popular con la que se han topado y probablemente no esperaban de un pueblo que, debido a sus excesos ha empezado a despertar y a romper con la "domesticación".

Pero cuidado: los Arias siguen vivitos y coleando.