Como una jugada política del Vaticano, analistas independientes latinoamericanos, interpretaron la elección del argentino Bergoglio como nuevo papa, en momentos en que muchos países del sur han iniciado una "segunda independencia".
Países como Venezuela, Bolivia, Ecuador, Brasil, Uruguay y Argentina, que protagonizan un proceso independentista de claro rumbo socialista, nacionalizando sus recursos antes entregados a países europeos y a E.U. y Canadá, son mayoritariamente católicos.
Sobre esto ha dicho Julio Gambina de Argenpress: "El Papa argentino, Francisco I, viene a cumplir el proyecto del poder mundial para disputar el consenso de la sociedad, especialmente de los pueblos. No solo se trata de sustentar posiciones contrarias al matrimonio igualitario, o contra el aborto, ampliamente difundidas por el obispo Bergoglio, sino de gestar una conciencia de disciplinar hacia el orden contemporáneo, reaccionario, de dominación transnacional."
El vaticano esperaría que con esta acción de designar a Bergoglio como la máxima autoridad de la poderosa y multimillonaria Iglesia, podrían contribuir a frenar el proceso de control estatal sobre la economía que se da en los países citados y que ha empezado a cundir en otros países de la región con movimientos socializadores como los de Colombia, Perú, Paraguay e incluso Costa Rica en manos de grupos opositores a los gobiernos neoliberales de dichos países y también tratar de atenuar su desprestigio por haber sido acusado por las Abuelas de la Plaza de Mayo, como cómplice en el robo de niños en la dictadura de Videla condenado a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad.
Intentan también la tendencia a frenar los reclamos en derechos humanos de movimientos homosexuales que claman por igualdad y otros asuntos como el aborto. Ya en Argentina se legalizó el matrimonio ente homosexuales, asunto que enfrentó a Cristina Kirtchner con el hoy Papa Jorge Mario Bergoglio que escogió el nombre de Francisco I.
El enfrentamiento fue tal que Bergoglio llegó a a firmar públicamente que : "Las mujeres son naturalmente ineptas para ejercer cargos políticos.El orden natural y los hechos nos enseñan que es el hombre el ser político por excelencia. Las escrituras nos demuestran que la mujer siempre es el apoyo del hombre, pensador y hacedor, pero nada más que eso"
Este nombramiento-han dicho- también distrae la atención sobre las acusaciones que pesan sobre el Vaticano de lavado de dinero.
Roncahuiteros: recomendé esta entrada en mi Facebook y Javier Solís dejó este comentario. Lo traigo porque está bueno:
ResponderEliminar"Coincido en todos sus extremos con el criterio de este articulista. Le elección de Bergoglio ha sido una jugada maestra, que derrotó, primero a Benedicto XVI, luego a los cardenales americanos, alemanes y asiáticos. Los católicos futuristas irán dejando su afiliación a la Iglesia con mucha celeridad. Las mujeres se verán cada día más marginadas y la maquinaria curial crecerá en poder y dinero de la mano de las grandes corporaciones transnacionales." js
Gracias por el aporte, don William.
EliminarRoberto.