Al pueblo lo podrán despojar de todo, menos de su derecho a la rebelión.

No nos informaron. Desde la primera administración Arias, llegaron , se propusieron como candidatos sin anunciar con claridad a los costarricenses que abandonaban la social democracia y nos lanzaban por los caminos del neoliberalismo que según Juan Pablo II, instala "el beneficio económico como valor supremo en detrimento de la dignidad de las personas y los pueblos".

No le dijeron nada a nadie y no era necesario, se habían quedado sin oposición y a la altura del año 90, ya Liberación Nacional y La Unidad Social Cristiana eran tan diferentes como "dos perritos gemelos con diferente collar".(Uno con collar verde y el otro con collar azul y rojo)

Entonces empezó la fiesta (para ellos) : a tratar de vender el ICE, a destruir los ferrocarriles, a abrirle paso a los banqueros privados, a deteriorar a la CCSS, a intentar vender el INS  y finalmente, a instaurar el TLC a punta de mentiras. (No era  ni siquiera necesario que aquél vicepresidente tristemente célebre lo recomendara en un mensaje por correo electrónico, porque ya lo estaban haciendo.)

Tenemos a dos expresidentes acusados de delitos económicos, otro que optó por el autoexilio, exfuncionarios bancarios en la cárcel, jueces y alcaldes enjuiciados o purgando penas en centros penitenciarios, la educación en crisis...

Y hoy, llegado el 2011, el resultado está a la vista: deterioro de las condiciones sociales, debilitamiento de las conquistas que le costaron al pueblo energía, sangre y lágrimas, aumento acelerado de la inseguridad, del precario, de la indigencia, abandono de la niñez  y todo dentro de un país donde parece haberse instaurado el reino de la violencia y el desamparo. 

No le pidieron permiso al pueblo. Lo engañaron. Pero al pueblo lo podrán despojar de todo, menos de su derecho a la rebelión.

¡Bienvenidos a Generación Rebelde 2011!